De nuevo llega el día de los enamorados...
Contra viento y marea.
El enamorado, la enamorada... hacemos todo lo posible para mantener la llama de nuestro amor.
Nos sobreponemos a los contratiempos. Luchamos por seguir unidos..., aunque en ello vaya nuestra propia salud....
Nos elegimos el uno al otro; y un día, tomamos la decisión de hacer juntos el camino. A veces lleno de rosas. A veces lleno de espinas....
La globalización ha traído de nuevo, el fanatismo por ésta celebración.
Sea o no un Santo de leyenda, todo el mundo celebra su día
14 de Febrero : San Valentín.
No he claudicado.
Sigo pensando que los centros comerciales hacen su agosto con éste día. Uno más.
Pero, hay que huir del sentido material de la fiesta.
Ya lo decía Manolo Escobar:
"Ni se compra, ni se vende, el cariño verdadero"
Una flor, un "te quiero"...
Cualquier día es 14 de febrero.
...Y mal vamos, si necesitamos que nos lo recuerden...
Hoy es domingo. El más próximo al día de San Valentín...¡¡postre especial!!
Un postre para levantar el ánimo. Porque, de todos es sabido, que el chocolate estimula. Nos hace sentir mejor en un momento de bajón.
Para celebrar éste día, solo necesitamos un poco de chocolate, unas fresas, y una buena compañía...💘
INGREDIENTES:
·
250
gr de chocolate negro de cobertura
·
75
gr de azúcar.
·
75
gr de mantequilla.
·
3
yemas de huevo (talla XL)
·
4
claras de huevo.
· 200
ml de nata para montar (35% M.G., mínimo).
·
1
tacita de café sólo (de las de moka)
PREPARACIÓN:
Picamos el chocolate. Añadimos el café y la
mantequilla, y dejamos que se funda lentamente en un cazo al baño María.
Cuando esté derretido, removemos bien para
que se integre todo, y dejamos atemperar.
Separamos las yemas de las claras.
Batimos las yemas en un bol.
Cuando notemos que el chocolate está tibio,
le vertemos en forma de hilo sobre las yemas. Sin dejar de batir. Mezclamos
bien.
Montamos la nata.
No hace falta que quede muy firme.
Para incorporar la nata al batido de yemas
y chocolate, primero pasamos una cucharada al chocolate.
Removemos bien. A
continuación, pasamos el resto de la nata y mezclamos con movimientos
envolventes.
Poco a poco, se irá aclarando el chocolate.
Montamos las claras en merengue suizo.
Mezclamos las claras con el azúcar. De
nuevo, pondremos un bol al baño María. Tendremos cuidado de que no toque el
agua hirviendo.
Removemos con unas varillas hasta que se deshaga el azúcar.
Normalmente, esto pasa cuando se ha alcanzado los 50 - 60º C pero, no pasa nada
si no tenéis termómetro. Basta con tocar el batido y comprobar que no se nota
el azúcar.
Retiramos del baño María y empezamos a montar hasta que se enfríen
las claras.
Incorporamos las claras al chocolate.
Pasamos +/- 1 tercio de las claras al bol y
removemos bien. Sin preocupación, es solo para igualar un poco la textura.
A
continuación, volcamos la mezcla del bol del chocolate en el del merengue y,
ahora sí, con una espátula mezclamos con cuidado realizando movimientos
envolventes. De abajo hacia arriba. Tenemos cuidado de no deshacer el merengue,
para que la crema quede espumosa.
NOTA:
Realizando un merengue suizo con las
claras, nos aseguramos de que no habrá ningún peligro al consumir la mousse.
Yo he utilizado café al fundir el chocolate
pero, se puede utilizar cualquier tipo de licor, si os gusta más (Cointreau,
Limoncelo, etc)
Para servir, se pueden adornar las copas
con fresas, virutas de chocolate, o nata montada, hojas de menta, etc.
💖 ¡¡ FELÍZ DÍA DE SAN VALENTÍN !! 💖
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