miércoles, 28 de febrero de 2018

BACALHAU À BRÁZ (Bacalao Dourado)





365 maneras diferentes, tienen los portugueses para cocinar el bacalao. Una para cada día del año.....






Mi madre tenía que llevar el bacalao desde Madrid cada vez que iba a su pueblo, que hace frontera con Portugal. Y es que, nada más llegar la provisión de bacalao a los comercios de la zona, se terminaba rápidamente...., porque iban los portugueses y acababan con las existencias...!!.

Y mira que, efectivamente hay mil y una formas de guisar el bacalao en Portugal. Pero una de las más famosas entre los españoles (por lo sencilla y resultona), es el BACALHAU À BRÁS (o BRÁZ).

Cómo siempre, el comienzo de una receta popular, viene del "descubrimiento" (hoy lo llamamos "innovación") de un mesonero que tenía su local en el Bairro Alto de Lisboa: El Senhor Bráz.

"Cocina de aprovechamiento", que dirían nuestras madres...
El apuro en el que se debió encontrar, el pobre Señor Brás, aquella noche que no le quedaban nada más que huevos y unos restos de bacalao asado...!!

¿Quién no ha comido nunca una tortilla de "ropa vieja"?.

Pues eso, el "bacalao a Brás" no es nada más que un revuelto de huevos con bacalao. ¡¡Pero qué revuelto, oiga!!.

Ahora que, a "ése" revuelto, hay que darle el toque de cada uno...

Yo no suelo pedir éste plato en los restaurantes portugueses. Pero mi marido, no lo duda en cuánto lo ve en la carta..., Y cada vez lo come distinto....!!!

Parece que también hay "365 maneras diferentes de cocinar el bacalao a Brás"....!!!. Y, ¡hasta tiene otro nombre según la zona de Portugal! "Bacalhau Dourado", por ejemplo

Por eso, no podemos categorizar a la hora de dar el punto a ésta receta.

Habrá quien la cocine en una cacerola profunda, removiendo el contenido hasta obtener una crema...¡Y estará delicioso!
Habrá quien cuaje los huevos en el horno...¡Y estará delicioso!
Habrá quien haga una "deconstrucción" de la receta...¡Y, seguro que estará riquísimo!.






Yo, voy a contaros cómo lo hago yo.







Insisto, cuando visito Portugal, me decanto por otras comidas menos populares entre los españoles. Y es que, Portugal tiene una gastronomía excelente. Y se comen otras cosas..., además de bacalao à Brás.

¡Por cierto!
Cómo no podía ser de otro modo, dedico ésa entrada a mi cuñadísima Marisa. Auténtica fan incondicional de éste plato. 



BACALHAU À BRÁZ
(Bacalao a Brás, o Bacalao Dorado)







INGREDIENTES (3 pax.)

·         300 gr de migas de bacalao desalado
·         2 cebollas medianas
·         1 diente de ajo
·         6 huevos
·         Aceite de Oliva Virgen Extra
·         Patatas fritas a la paja
·         Sal y pimienta al gusto
·         Perejil
·         Aceitunas negras.




PREPARACIÓN:

Ponemos a desalar las migas de bacalao el día anterior.
Primero le quitamos el exceso de sal y luego lo echamos en un bol grande que llenaremos de agua fría. Lo dejaremos en el refrigerador, y cambiaremos el agua varias veces a lo largo del día.
Para comprobar el punto de sal, yo pellizco un trocito de la carne del pescado y lo pruebo…






Una vez desalado, escurrimos y secamos bien el bacalao.






Pelamos las cebollas y las picamos muy finas. Bien en juliana, o bien en brunoise. Al gusto.
En una sartén o cacerola amplia, con el fondo cubierto de aceite (sin pasarnos), ponemos a pochar la cebolla, espolvoreada con sal y pimienta.

Dejamos a fuego lento/medio hasta que se ponga transparente.
Picamos un diente de ajo, al que le hemos extraído el germen. Lo añadimos a la cebolla que se está pochando, y esperamos a que todo se quede blandito.

Mientras las verduras se están rehogando, vamos haciendo tiras el bacalao. Se puede hacer con la mano, o empleando alguna herramienta, cómo unas tijeras o un cuchillo. Reservamos.

Podríamos freír, igualmente las patatas…, pero venden unas ya preparadas que nos ahorrarán el trabajo…, jejeje. Reservamos las patatas.

En un bol grande, batiremos 2 huevos por persona. Para que la preparación final quede más cremosa, al batido le añadiremos un par de cucharadas de leche. Reservamos.
Picamos unas hojas de perejil y las reservamos.



Una vez están bien pochadas las verduras, todo va muy rápido.
Elevamos la potencia del fuego y añadimos el bacalao. Le damos vueltas lo justo, para que quede jugoso.
A continuación, vertemos los huevos batidos y removemos con cuidado para que vayan cuajando.
Por último, se echan las patatas, un poco de perejil picado, y mezclamos bien todo.


Éste último paso se puede realizar de varias formas y maneras. Dependiendo del gusto, y el estilo de cada cual. (*)

Para servir, adornamos con más perejil y acompañamos con aceitunas negras.


(*) En casa, ésta receta nos gusta que quede con los ingredientes jugosos: El bacalao coagulado lo justo; el huevo cremoso, pero no crudo y las patatas que se “noten”, no que “desaparezcan” entre el resto de ingredientes….


  

miércoles, 21 de febrero de 2018

POTAGE PARMENTIER



¡Qué nombre tan rimbombante le dieron los franceses al puré de patatas!.
Ni más, ni menos, que el nombre del "descubridor" de la patata para la cocina francesa.





Antoine-Augustin Parmentier consiguió convencer a los franceses de que "aquello" se comía...

Eso ya lo sabían los españoles que la trajeron a Europa desde América, ya en el S. XVI.

Vaaale.
Al principio los españoles tampoco se la comían. Solo era una "curiosidad botánica".

Primero hicieron escala en Gran Canaria. De ahí que por aquellas islas, se las llame "papas", utilizando el vocablo Quechua que define al tubérculo en cuestión.
Desde Canarias se fueron expandiendo al resto de Europa, tocando puerto ésta vez en Amberes (Flandes) y Le Havre (Francia).

Incluso entonces, no era un producto que llamase la atención del consumidor de a pie. Hicieron falta varios años de sequías y hambrunas para que la gente se decidiera a echar aquello en sus ollas...
Pero es que, el hambre es una cosa muy mala...!!.

Fue cuando un fraile cocinero de un hospital de beneficencia sevillano, compró los nuevos tubérculos a precio de ganga para alimentar a los pobres enfermos....
Luego empezaron a cultivarlos en su huerta....
Después en las huertas de los demás hospitales..., etc, etc, etc.

Desde entonces, la patata se convirtió en el alimento "estrella" de tropas y pobres...
Pero la gente refinada y elegante, seguía sin comer "aquello"... (no era chic)
Bueno, seguro que alguno lo comería, pero "el postureo" de la época, impediría dar pábulo al hecho..., y ¡nunca mejor dicho!

Y es ahí, al cabo de dos siglos de llegar las papas a Europa, cuando el Señor Parmentier (ilustre agrónomo, naturalista, nutricionista y más cosas),  sufrió también la hambruna del prisionero durante la Guerra de los Siete Años, que al volver a su Patria dijo: ¡Oigan, que no está tan malo...!.

Desde entonces y gracias a la publicidad real (Luis XVI se paseaba con una flor de patata en la solapa...), los franceses acabaron aceptando que Mr. Parmentier tenía razón...

En España tenemos un dicho: "Lo dijo Juan, ¡punto redondo!".

Es por eso que la cuisine française llama "Parmentier" a cualquier preparación en la que el ingrediente principal sea la patata...

Hechas las aclaraciones, paso a describir mi manera de hacer la crema de puerros y patatas...

Y, cómo yo también quiero ser sofisticada, en mi casa hemos dejado de llamarla así.

Ahora se llama: "CREMA PARMENTIER".
JAJAJAJAJA.

CREMA PARMENTIER

INGREDIENTES (4 pax.)

  • 1 puerro hermoso, o 2 puerros medianos (sólo la parte blanca)
  • 3 patatas medianas
  • 1 l de caldo de ave ligero.
  • Pimienta recién molida
  • Sal
  • Nuez moscada (opcional).
  • Aceite de Oliva Virgen Extra.
  • 200 ml de crema de leche, o leche evaporada

PREPARACIÓN:

En una cacerola de fondo grueso, calentar unas cucharadas de AOVE.



Picar los puerros en juliana.

Espolvorear con sal y pimienta y rehogar suavemente en el aceite evitando que se doren.

Incorporar las patatas picadas en lascas (cómo para tortilla).








Rehogar todo junto durante unos minutos.








Añadir el caldo de ave, y las ralladuras de nuez moscada.
Tapar la cacerola, y dejar cocer a fuego lento, hasta que las verduras estén tiernas.
Retirar del fuego.











Triturar todo hasta dejar una crema muy fina.









Volver a poner la cacerola al fuego y añadir la crema de leche, o leche evaporada (lo que hayamos elegido).
Rectificar el punto de sal, pimienta y nuez moscada.
Calentar a fuego bajo, removiendo con una cuchara de madera.











                                      

                                        Servir.












NOTA: ¡Por supuesto que se puede hacer en olla express!. Aunque, lo fetén, es hacerla a fuego lento....









sábado, 17 de febrero de 2018

LOMBARDA BRASEADA





Una de mis verduras favoritas es la lombarda.







De todos es sabido, que la lombarda es (o era) el plato típico de la Nochebuena madrileña. "El pavo de la huerta".

Aunque, ahora no se considera un menú lo bastante sofisticado para la ocasión....

Normalmente la guiso al vapor, para que mantenga su atractivo color.
Para ello, mi olla a presión es la herramienta ideal.
Después de cocida, se puede rehogar con un poco de cebolla, ajo y una pizca de pimentón.

Para lucirnos, no hay nada cómo cocinarla braseada.

Además de no perder ese maravilloso color morado, resulta un acompañamiento ideal para un asado. O, simplemente, cómo primer plato en una comida con invitados.





Y para brasear un alimento, obviamente, la mejor herramienta es una cocotte.






Yo disfruto enormemente cocinando a fuego lento.
Ahora estoy jubilada desde hace unos meses..., pero antes dedicaba los fines de semana para mimar a mi familia con esos guisos más elaborados que requieren atención y paciencia...

La verdad, es que  cocinar en una cacerola de hierro fundido como las cocottes, es muy parecido a utilizar una olla de barro. Los guisos se hacen prácticamente solos, y a fuego bajísimo. A éste tipo de cocción, los franceses le llaman "mijoter".

La diferencia entre una olla de barro y una de hierro es evidente: el barro tiene fecha de caducidad..., y el hierro.., casi que no.
Pero también, hay una diferencia abismal entre una y otra... el precio.

Claro que, se pueden encontrar ofertas estupendas en internet. O si vivís en Madrid o Barcelona, los outlets de la marca Le Creuset siempre tienen grandes descuentos...

Además, podéis considerar que se trata de una inversión. Una herencia que dejar a vuestros hijos "cocinillas". (Los míos, ya no se van a pelear. Hay una cocotte para cada uno..., jejeje)




Éste año, los Reyes Magos me han dejado una cocotte ovalada de un color entre rosado y malva.







Con ése tono, qué mejor estreno que brasear una col lombarda...jejeje




 LOMBARDA BRASEADA


 
INGREDIENTES (4 pax.)

·         1 lombarda de alrededor de 1 kg
·         35 gr. de mantequilla
·         2 cucharadas de Aceite de Oliva Virgen Extra
·         2 cucharadas de vinagre de jerez
·         2 - 4 cucharadas de agua.
·         Sal
·         Pimienta.
·         1 manzana Granny Smith
·         Azúcar moreno (c.n.)




PREPARACIÓN:

Ponemos el aceite y la mantequilla a derretir en el fondo de una cocotte.


Cortamos las hojas de la lombarda en juliana fina, eliminando la mayor parte de los nervios de color blanco.
Una vez troceada, incorporamos la lombarda a la cocotte. Añadimos el vinagre, las cucharadas de agua y salpimentamos al gusto.





Rehogamos 2 minutos a fuego más alto, removiendo la verdura para que no se queme. 



Tapamos la cocotte y reducimos la potencia del fuego al mínimo.
De vez en cuando, daremos una vuelta a la verdura. Si consideramos que hace falta más líquido, se le puede añadir un poco más de agua.





Dejamos que la lombarda se haga durante 1 hora.
Pasada esa hora, la verdura estará casi en su punto.



Es el momento de añadir 1 manzana cortada en cuartos, laminada y rebozada en azúcar moreno.
Removemos para que se mezcle la manzana con la lombarda, y tapamos de nuevo la cocotte.







Dejamos cocer (siempre a fuego muy lento) durante algo menos de ½ hora.
La verdura estará en su punto y la manzana se habrá teñido con los jugos de la lombarda.





Retirar del fuego.
El calor residual que desprende la cocotte, mantendrá la verdura caliente hasta el momento de servirla a la mesa.

ooooooo

NOTA: Si se desea, ésta receta se puede hacer en el horno.  En una cocotte o en una cazuela refractaria tapada herméticamente.
A mí me gusta más hacerla a fuego lento. Me resulta más cómodo para vigilar el punto de cocción.
En el caso de no disponer de una cocotte de hierro fundido, hay que usar una cacerola de fondo grueso y cuya tapadera ajuste perfectamente para no dejar escapar el vapor.











sábado, 10 de febrero de 2018

ENSALADA LIGERA DE ARENQUES A LA CREMA (Heringssalat)





Hace unos días, subí la receta de la  típica ensalada de arenques y remolacha.






Ésta de hoy, es parecida.
Realmente, todas las ensaladas alemanas que llevan arenque marinado, son bastante parecidas.
Pueden ser con patata, sin patata, con manzana, con yogurt, con crema agria....
Hay un sin fin de variedades. Y todas me gustan.

Sí, todas.

En mi último viaje a Berlín, tomaba para desayunar una ensalada similar a la que os presento.
¡Me hacía un sandwich de pan negro con ensalada de arenque!
¡¡Mortal, de necesidad!!

Bueno.
No quiero ponerme pesada. 

Ah!. No os preocupéis por el puré de rábano. Lo encontraréis en el lineal de  las salsas de vuestro supermercado. Pero, si no lo hay, se rallan dos o tres rabanitos pelados.

Aquí os dejo la receta de 


ENSALADA DE ARENQUES A LA CREMA
(Con manzana y rábano)

INGREDIENTES (4 pax)


·         300 gr de filetes de arenque estilo BISMARCK.
·         250 gr de Crème Fraîche, o 2 yogures tipo griego.
·         50 ml. de leche evaporada.
·         1 cucharada de zumo limón.
·         2 cucharadas de té de puré de rábano.
·         1 cucharada de té de mostaza dulce.
·         1 cebolleta roja.
·         2 pepinillos agridulces (de los grandes)
·         1 manzana (variedad Pink Lady, Braeburn, Fuji, Red Delicius, o similar)
·         Sal.
·         Pimienta recién molida.
·         Eneldo fresco.
·         Cebollino fresco.

PREPARACIÓN:

Mezclaremos todos los ingredientes en una ensaladera.


Para ello, lavamos la manzana y eliminamos el corazón con las semillas, la cortamos en cuartos y fileteamos los trozos lo más fino posible. No le quitamos la piel.
La cebolleta roja, la picamos en Juliana.
Los pepinillos en láminas finas.

Los filetes de arenque, los troceamos en tiras de 1 centímetro.
Las hierbas (eneldo y cebollino), las picamos finamente.



 


Por otro lado, mezclaremos en un bol pequeño: la Crême Fraîche (o los yogures griegos), las cucharadas de puré de rábano y la mostaza.
Removemos con un tenedor.










Espolvoreamos con sal y pimienta al gusto, aligeramos con la nata líquida (en mi caso, leche evaporada) y el zumo de medio limón.
Batimos bien hasta integrar todos los ingredientes.












Vertemos sobre la picada de la ensaladera grande.












Removemos bien, y reservamos en el refrigerador hasta la hora de servir.






NOTA: Esta ensalada, se puede acompañar con patatas hervidas al vapor.





Espero que os guste tanto cómo a mí